Las Islas Ballestas no estan ajenas a lo problemas que afectan a la Reserva Nacional de Paracas. La RNP a pesar de encontrarse protegida por ley, no están libre de inconvenientes y factores externos que pueden influir en la ruptura de su equilibrio ecológico.
Algunos de estos problemas son:
- La caza de especies como el delfín, la tortuga de mar, el gato marino y el lobo de mar, lo cual redujo sus poblaciones de manera considerable.
- Las malas prácticas de pesca por parte de algunos pescadores informales, quienes emplean explosivos en botellas, método llamado “bombeo”, además del constante tráfico de botes, genera movimiento y perturba a las aves.
- La contaminación originada por los flujos de desechos provenientes de las fábricas procesadoras de pescado, de almacenes de combustible y del puerto de Pisco.
- La contaminación provocada por los visitantes, en especial a causa de malos hábitos como el arrojo de desperdicios al mar y la costa, además casos de ruido causado por la música alta de los autos y a consecuencia de la práctica de deportes, como el esquí acuático.
Todo esto perturba a las aves y mamíferos. Es necesario un mayor grado de control y una campaña eficaz de difusión sobre la importancia de la Reserva y la manera de conservarla. Sería muy importante incidir en estudios científicos para así determinar los niveles de contaminación y normar el tráfico hacia el terminal marítimo, a fin de minimizar el ruido. A su vez contar con un mayor número de guardaparques y policías para vigilar las actividades de turistas y pescadores. El Estado debería incidir en las labores de investigación científica de la zona, por otro lado se debería buscar mayor apoyo económico por parte de los países del exterior para el financiamiento de proyectos que permitan el empleo de mejores tecnologías para el control de la pesca.
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Es una pena saber que son los problemas de siempre. Tal vez integrando estas islas a la Reserva Nacional de Paracas se pueda disminuir el efecto de la caza y pesca. La contaminacion por parte de las industrias pesqueras pues deberia ser regulado por las autoridades pero eso es una utopia aqui. Por lo pronto, lo que si se puede hacer es controlar la contaminacion provocada por los turistas, hay diversas formas pero lo primero es el compromiso de las empresas turisticas que hay alla.
ResponderEliminarEs muy cierto, los problemas siguen siendo los mismos, y aunque es necesario integrar las Islas Ballestas al Sistema de Áreas Naturales Protegidas, lamentablemente esto no asegura su protección o conservación, ya que los problemas que mencionan son una constante dentro del ámbito de la Reserva Nacional de Paracas. En lo personal pienso que la mejor manera de contribuir a la conservación de un ambiente y la biodiversidad que contiene, es creando conciencia “ecológica” en la población. La educación ambiental, es la herramienta clave con la que contamos para luchar por la preservación de los ambientes naturales. Esto junto con una acertada política de desarrollo crearían un panorama más alentador para el futuro de nuestros ecosistemas.
ResponderEliminarCreo que algo que también debe tomarse en cuenta, aunque requeriría un poco más de participación de los gobiernos regional y central, es buscar otras actividades económicas en esta parte del país de tal manera que no todo se enfoque en la pesquería y el turismo.
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